Artículo del Dr. Jorge Barudy en "Listin Diario" sobre el Síndrome de Munchausen
Un ejemplo que ilustrará lo antes expuesto es la desafortunada historia de una madre de origen estadounidense que provocó la muerte a su hijo de 5 años haciéndole injerir a través de un tubo gastrointestinal que el menor tenía implantado considerables cantidades de sal. La mujer provocó la muerte del niño cautivada por la atención que le proporcionaba la publicación en un blog que ella había creado y en las redes sociales los detalles sobre la evolución del pequeño.
La dosis letal suministrada por la mujer fue revelada por un video en el que se ve a la madre entrar con su hijo al baño del hospital donde este se recuperaba de una crisis. Según el psiquiatra infantil, psicoterapeuta y terapeuta familiar, Jorge Barudy y la Psicóloga clínica Lía Biaggy esta mujer padece lo que se conoce como el Síndrome de Munchausen por poderes. Los profesionales de la salud mental puntualizan que habría que estudiar a profundidad el historial de Lacey Spears para hacer un diagnóstico más certero. Este trastorno psicológico es una forma de maltrato infantil en el que uno de los padres induce en el niño síntomas reales o aparentes de una enfermedad provocada. La persona que padece este trastorno por lo general tuvo una niñez desdichada, de acuerdo con Barudy.
Barudy, encuentra este tipo de situaciones como “un drama perverso” y asegura que para un especialista es complicado de detectar por el hecho de que la madre o tutor se muestra en todo momento colaboradora, preocupada, y abnegada. La psicóloga Clínica, Lía Biaggi corrobora las declaraciones de Barudy y agrega que esas personas que padecen el síndrome de Munchausen buscan la compasión, y la compresión de los médicos y las personas que los rodean, razón por la cual, se muestran tan sufridos. “Me interesa mucho la historia para entender el punto de partida” dice el psiquiatra Jorge Barudy muy concentrado. “con este caso habría que explorar más a fondo para poder diagnosticar”, agrega la psicóloga Lía Biaggi con absoluta profesionalidad.
Barudy que, describe a la mujer como “una criminal nata” entiende que el elemento que agrava aún más el caso es que la desnaturalizada madre estuviera colgando en las redes sociales la situación de su hijo, para ganar la compasión de sus seguidores durante de cinco años. “Una persona que padece este síndrome lo que busca es ser protagonista de la historia, (aunque uno lo es por el hecho de existir), sentirse querido, llenar un vacío existencial”, asegura el psiquiatra Jorge Barudy.
El psiquiatra profundiza un poco más en su opinión y dice que cuando se llega al punto de provocar la muerte de un niño para satisfacer una situación personal, eso da luces de que mentalmente no hay mucho que hacer. Por otro lado, la psicóloga clínica ve como positivo el apoyo que las personas le dan a este tipo de casos cuando son verídicos, y lamenta que éste lejos de ayudarla de manera positiva, la fue impulsando para que el resultado fuera la muerte del niño.
La experta entiende además que las personas que les gusta seguir este tipo de situaciones dolorosas; que encierran una patología, aún cuando no saben que el problema podría ser provocado de igual forma su conducta es objeto de estudio. Barudy por su parte entiende que ven en el dolor ajeno su propia situación. Para Jorge Barudy, el síndrome podría ser tratado si se detecta a tiempo, aunque reconoce que es raro que exista. “lo más importante es que la gente se concientice”.
“Difícilmente las personas comunes noten el problema”. Es más propio del pediatra que es quien debe referir al psicólogo. Agrega Lía Biaggy. A pesar de que en el país oficialmente no existe ningún caso con estas características sería conveniente curarse en salud y prestar atención a este tipo de patologías tan nocivas para la salud y el bienestar de quienes no pueden defenderse por sí mismos.